La organización indígena ORPIO (Organización Regional de los Pueblos Indígenas del Oriente), con sede en Iquitos, Perú, apoyada por el Instituto de Defensa Legal, anunció hoy que ha presentado una petición formal a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para que actúe urgentemente en la protección de los seis territorios de los pueblos indígenas no contactados.
Estas seis reservas son: Yavarí – Tapiche (Departamento de Loreto), Kakataibo (Ucayali), Yavarí Mirim (Loreto), Sierra del Divisor Occidental (Loreto y Ucayali), Napo-Tigre (Loreto) y Atacuari (Loreto).
Este llamamiento de emergencia ante el principal organismo de derechos humanos de América se produce por las crecientes amenazas que afectan a las reservas amazónicas propuestas a favor de los pueblos no contactados, cuyo estatus legal permanece en el limbo desde hace 27 años.
El Gobierno de Perú ha reactivado las concesiones madereras, petroleras y de gas en estas zonas, y mientras las reservas no se establezcan debidamente es probable que se adjudiquen aún más concesiones.
Desde que se inició la creación de estas reservas han transcurrido entre 15 y 27 años, pero nunca se completaron de forma oficial.
ORPIO solicita a la Comisión que ordene al Gobierno de Perú finalizar la creación de las seis reservas indígenas y promulgar las medidas necesarias para garantizar la salud y el bienestar de los indígenas no contactados que habitan en ellas, teniendo en cuenta la pandemia de Covid-19 que azota intensamente al país y la invasión de foráneos que sufren las reservas.
“Durante la pandemia de Covid-19 el Estado peruano no realizó ninguna acción concreta para preservar su vida e integridad y, por el contrario, autorizó la entrega de concesiones forestales y de hidrocarburos”, afirma ORPIO en su presentación.
Y añade: “Ante un Estado lento e indiferente, las mencionadas acciones permiten que se tomen decisiones inmediatas para proteger de forma adecuada y efectiva a los pueblos indígenas en aislamiento como su derecho a la vida, su derecho a la salud y su derecho a la integridad física. De lo contrario, estas poblaciones podrían desaparecer, es decir, extinguirse. Es preciso recordar que, en el Perú, existen más de veinte pueblos no contactados y que están en peligro de extinguirse, peor aún ante una pandemia que ha golpeado, sobre todo, a los grupos históricamente más vulnerables como los PIAVCI”.
Teresa Martínez, investigadora de Survival, declaró hoy: “Ningún procedimiento creado para la protección urgente de la vida puede demorarse tantos años. Esta actitud del Estado peruano es ilegal, inmoral y genocida y solo se explica por la ambición de obtener beneficios y la ausencia total de voluntad política para establecer las reservas y proteger las vidas de los pueblos no contactados, los más vulnerables del planeta”.
Foto de portada: tribus no contactadas. Créditos: G. Miranda/FUNAI/Survival
Fuente: Survival