Por RAI*
Bolivia vuelve a ocupar los primeros lugares en el ranking mundial de los países con la mayor pérdida de bosques. Una superficie de 276.883 hectáreas de bosques se perdieron durante el 2020, y un acumulado de 3.019.955 millones perdidas entre los años 2002 a 2020, de acuerdo con datos de la Universidad de Maryland, que fueron publicados hoy en Global Forest Watch.
A pesar de una leve reducción en la pérdida de bosques primarios con respecto al año anterior, Bolivia ascendió al número tres en la lista de los países con una mayor pérdida de bosques primarios tropicales húmedos en 2020, y superó a Indonesia por primera vez.
Leer más / Ganadería en Bolivia: se amplía la exportación, se reducen los bosques
Al igual que en 2019, los incendios forestales jugaron un papel importante. En particular, los incendios afectaron varias áreas protegidas, incluido el Parque Nacional Noel Kempff Mercado. Igual como ocurrió en Brasil, la mayoría de los incendios en Bolivia probablemente fueron provocados por personas para limpiar el suelo, pero se descontrolaron debido a las condiciones de sequía y al clima caluroso. La actividad agropecuaria a gran escala también afectó a los bosques, ocasionando numerosos nuevos desbosques en el departamento de Santa Cruz.
El listado de Global Forest Watch (GFW), lo lidera Brasil, quien vuelve a encabezar la lista de pérdida anual de bosques primarios, con una pérdida total de 1.7 millones de hectáreas en 2020, más del triple que República Democrática del Congo (RDC), que le siguió en segundo lugar, con una pérdida de 490.000 hectáreas de bosque primario perdidos en 2020.
La Destrucción de los Bosques Primarios Aumentó un 12 % de 2019 a 2020
De acuerdo con GFW, en el 2020, los trópicos perdieron 12.2 millones de hectáreas de cobertura arbórea. De esta superficie, 4.2 millones, una superficie del tamaño de los Países Bajos, pertenecían a bosques primarios tropicales húmedos, los cuales son especialmente importantes para el almacenamiento de carbono y la biodiversidad. Las emisiones de carbono resultantes de esta pérdida de bosque primario (2.64 Gt CO2) equivalen a las emisiones anuales de 570 millones de autos, más del doble del número de autos que circulan por las carreteras de Estados Unidos.
En 2020, la pérdida de bosque primario fue un 12% mayor que el año anterior, y fue el segundo año consecutivo en que la pérdida de bosque primario empeoró en los trópicos.
El año 2020 debió ser un hito en la lucha contra la deforestación, pues fue un año en el que muchas empresas, países y organizaciones internacionales se habían comprometido a reducir a la mitad o detener por completo la pérdida de bosques. Las continuas pérdidas de bosques tropicales primarios dejan claro que la humanidad se ha quedado corta en el cumplimiento de estos objetivos.
Al igual que en años anteriores, la deforestación impulsada por los productos de consumo básicos fue la causa principal de la pérdida de cobertura arbórea (tanto en los bosques primarios como en los secundarios) en América Latina y el Sudeste Asiático, mientras que la agricultura migratoria fue la causa dominante en el África tropical. Adicionalmente, los incendios y otros impactos relacionados con el clima desempeñaron nuevamente un rol importante, tanto en los trópicos como fuera de ellos.
Imagen principal: deforestación en la Chiquitania. Foto: Eduardo Franco Berton
*Con datos de Global Forest Watch