Por RAI
Los peces de cuatro ojos del género Anableps y sus parientes son una familia de peces del Neotrópico con una serie de rasgos extraños que han fascinado a los naturalistas durante siglos. Estos incluyen: (i) un ojo “dividido” que les permite ver tanto arriba como debajo de la superficie del agua al mismo tiempo; (ii) dan a luz a descendientes completamente desarrollados, al igual que los mamíferos; y (iii) genitales notablemente asimétricos entre los machos de todas las especies y entre las hembras de algunas especies.
Asimétrico y polimórfico
Los genitales de los machos, llamados gonopodios, son aletas anales transformadas que pueden usarse como órgano copulatorio para inseminar hembras compatibles. Curiosamente, estas estructuras en forma de pene son asimétricas y su punta está doblada hacia la izquierda o hacia la derecha. Las hembras a su vez tienen un sobrecrecimiento asimétrico de tejido que cubre la abertura genital lateralmente. En consecuencia, solo los machos y las hembras compatibles pueden aparearse con éxito. Dentro de las poblaciones, existen tanto diestros como zurdos. Sorprendentemente, la pregunta sobre si esta asimetría es heredable o aleatoria ha permanecido sin resolver durante más de un siglo.
Una nueva investigación llevada a cabo por biólogos evolutivos de la Universidad de Konstanz en colaboración con la Fundación Miguel Lillo en Argentina y publicada en el journal científico Proceedings of the Royal Society B muestra que la dirección de la asimetría genital en los peces con discapacidad no se hereda, sino que, de hecho, se determina al azar.
Por qué el lado importa
“Comenzamos con una pregunta bastante simple”, dice Julián Torres-Dowdall, autor principal del estudio e investigador en el laboratorio de Zoología y Biología Evolutiva de la Universidad de Konstanz: “¿Los machos zurdos procrean en su mayoría hijos zurdos?, aunque pueda parecer una pregunta extraña, para los biólogos evolutivos la asimetría en general y el tema de la heredabilidad en particular, es increíblemente interesante debido a su potencial para impulsar la aparición de nuevas especies “.
Los peces anablepidos son especialmente interesantes no solo porque sus genitales son asimétricos, un rasgo poco común que comparten con algunos insectos, serpientes, la mayoría de los mamíferos rumiantes, aves acuáticas y ciertas familias de peces. Curiosamente, los individuos con genitales izquierdos o derechos tienen proporciones similares dentro de las poblaciones de peces. “Esto es raro y útil al mismo tiempo, ya que nos permite abordar el tema de la heredabilidad y, en consecuencia, comprender la evolución y el mantenimiento de ambas formas genitales (zurdos y derechos) y su potencial para diferenciar las poblaciones y posiblemente la especiación”, agrega Torres-Dowdall.
Oportunidad, no genética
Para determinar si la lateralidad de los genitales en los peces anablepidos se determina genéticamente y se transmite a la siguiente generación, los investigadores estudiaron dos géneros de la familia Anablepidae: Anableps, que comprende tres especies de peces de cuatro ojos, y Jenynsia, un género compuesto por 15 especies. Combinando experimentos de cría con análisis genómicos, el equipo estableció que no existe una fuerte heredabilidad en la dirección de la asimetría genital en los peces anablepidos.
“Nuestros experimentos con poblaciones cautivas y naturales mostraron que todas las crías eran asimétricas, con una proporción casi igual de genitales izquierdo y derecho en las poblaciones naturales y en el experimento de reproducción”, dice Torres-Dowdall. En ambos casos, el lado genital de los hijos era independiente del lado del padre. “Esto sugiere que la dirección de la asimetría está determinada por el azar en lugar de la herencia y explica de alguna manera la persistencia de este rasgo peculiar en el tiempo”.
La incompatibilidad entre morfos no es un motor de especiación
Los análisis genómicos no mostraron evidencia de que los marcadores genéticos, es decir, regiones específicas del genoma, estén asociados con la asimetría genital. Además, no hubo evidencia de diferencias genómicas acumuladas entre los individuos del lado izquierdo y derecho. Esto se ajusta al patrón general que se encuentra en otras especies con rasgos asimétricos similares.
Además, no hay ninguna sugerencia de que la existencia de genitales izquierdos y derechos debería considerarse como posibles impulsores de la especiación: “Existe la idea de que la incompatibilidad entre los individuos zurdos y diestros podría dar lugar a la evolución de dos nuevos asimétricos, ya sean individuos zurdos o diestros”, explica Torres-Dowdall. “Sin embargo, para que una nueva especie evolucione, la variación en la dirección de la asimetría debería tener un componente genético. Nuestro estudio sugiere firmemente que este no es el caso de los peces anablepidos”.
Foto de portada: Un espécimen de Anableps, un género de peces de cuatro ojos que, junto con sus parientes, constituyen la familia de peces Anablepidae. Créditos: Jan Gerwin y Sina Rometsch
