Por Kantuta Wyñay Palenque Nieto
La importancia de la protección de especies de animales para evitar su extinción no es un capricho de los llamados conservacionistas, mas bien una responsabilidad de todos los habitantes de nuestro planeta. Cada uno de los seres vivos tiene un importante papel en el mantenimiento del equilibrio de los ecosistemas que habitan y su ausencia puede provocar un desequilibrio con serias consecuencias, y este es el caso de nuestro quirquincho.
El género al cual pertenece el quirquincho es Chaetophractus y este a su vez comprende tres especies que son: Chaetophractus villorosus, Chaetophractus vellerosus y Chaetophractus nationi, siendo este último el quirquincho andino o de la puna. El quirquincho andino es el único que ha logrado adaptarse a la vida en la altura, su rango de distribución es estrictamente altoandina, habitando en áreas abiertas con condiciones arenosas y semi desérticas. Oruro se constituye como localidad tipo de esta especie, razón por la cual este animalito es considerado símbolo emblemático de este Departamento.
El quirquincho es una especie endémica y juega un papel importante en su ecosistema ya que al cavar madrigueras con túneles permite incorporar oxígeno al terreno y que especies de flora de la zona puedan desarrollarse. Es también considerado un controlador de posibles plagas ya que tiene acceso a las raicillas y, si estas presentan algún problema como larvas por ejemplo, el quirquincho se las comerá constituyéndose en un controlador biológico por excelencia. Otra característica interesante es que no defeca al aire libre sino dentro de su guarida aportando materia orgánica que favorecerá el crecimiento de plantas y otros animales. Sus guaridas abandonadas cobijan a otros animales que no construyen las suyas, además que en la cadena alimenticia es presa de zorros y felinos de la zona.
El quirquincho es una especie muy amenazada en nuestro país. Hace varios años que su hábitat se está afectando, los arenales existentes en los alrededores de la ciudad de Oruro loteados o convertidos en basurales públicos por los vecinos, ha coadyuvado a la pérdida de sus poblaciones, ya que no se tiene datos actuales de presencia de la especie en estas zonas.
También, los arenales existentes en el altiplano central de Oruro, son utilizados como campos de tiro de Unidades del Ejército, y se transportan cantidades considerables de arena para el enlosetado de calles, para la construcción de caminos y rellenado de campos de vóleibol de playa. Por otro lado, la ampliación de la frontera agrícola hacia las formaciones de grandes arenales hace que el quirquincho andino compita con los comunarios de la zona por el alimento, considerándolo “plaga”, no por la cantidad de quirquinchos sino por el daño que ocasionan a los cultivos de la papa ya que al buscar insectos y larvas escarva el terreno sembrado interrumpiendo el crecimiento normal del cultivo.
Al parecer, la especie ha empezado a utilizar los cultivos como una fuente más de alimento (en busca del gusano la`kato). Culturalmente es utilizado en una serie de sortilegios como amuleto para atraer la buena suerte, es muy común ver quirquinchos taxidermizados en lugares donde se lee la suerte, también es muy solicitado en tiendas y joyerías para atraer clientela, en la medicina tradicional es cotizado por su grasa, cola, huesos, garras y pelaje y también es utilizado como carne por los pobladores indicando que es de mucha utilidad cuando las mujeres presentan síntomas de sobreparto y para aquellas personas que tienen problemas de pulmón y riñón.
El daño más grave que se hace a esta especie es en la época de carnaval, es irónico que los oruereños se identifiquen con esta especie, pero que paralelamente sea una de sus fiestas, el Majestuoso Carnaval de Oruro, “Patrimonio Intangible de la Humanidad”, la causante de la caza indiscriminada de quirquincho para la fabricación de matracas.
Son dos morenadas las que utilizan matracas hechas de quirquincho como símbolo de “status y originalidad”; La Morenada Central Oruro y la Morenada Central Cocani, las que año tras año en la entrada de Carnaval se puede evidenciar mayor cantidad de morenos turrilitos y cholitas que van formando nuevos bloques dentro de estos dos conjuntos que usan este particular accesorio para completar la famosa”vestimenta de la morenada”, sin percatarse que si hay demanda, la consecuencia lógica sera más quirquinchos muertos en nombre de la moda folklorista popular que ha llegado a confundir lo original con lo tradicional.
Actualmente existen Leyes para la conservación del quirquincho a nivel Mundial:
– Se encuentra en la categoría Vulnerable según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
– La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre (CITES) protege al quirquincho mediante un acuerdo internacional concertado entre gobiernos del que es parte Bolivia.
A nivel Nacional:
– Según el libro Rojo de la Fauna Silvestre de Vertebrados de Bolivia esta especie se encuentra en la categóría En Peligro.
– (1975) La Ley 12301 de Vida Silvestre, Parques Nacionales, Caza y Pesca establece las condiciones para la protección, el manejo, aprovechamiento, transporte y comercialización de animlaes silvestres y sus producros y la preservación de su habitat.
– El artículo 96 de la Ley 12301 indica: que la exportación de animales de fauna silvestre está permitida con excepción de las especies protegidas por los reglamentos nacionales e internacionales y cuando afecte al equilibrio biológico o ecológico del país, debiendo ser regulada por reglamentación especial. Al no contar esta Ley con la reglamentación, la aplicación generó un vacío e ilegalidad.
– (1986) El Gobierno mediante Decreto Supremo 21312 declara Veda por tres años.
– (1990) Mediante Decreto Supremo 22641 nuevamente se declara la Veda total e Indefinida con la excepción de trabajos de investigación (aún vigente)
– La Ley de Medio Ambiente (1333), aprobada en 1992 contiene normas generales relativas a la conservación de la vida silvestre. Tipifica la caza furtiva de animales silvestres como delito ambiental, y señala la sanción pertinente de tres años de carcél en un penal público o el pago de una multa muy alta.
A nivel Departamental:
– La Ordenanza Municipal Nº 31/99 en su artículo único indica: Que a partir del Carnaval 2000 se prohibe a los grupos de Morenadas y otros, utilizar el caparazón de quirquincho como matraca y/u otro ornamento con el fin de conservar los recursos de la diversidad biológica, quedando encargados del cumplimiento de esta disposición El Honorable Alcalde Municipal, Oficialía Mayor de Cultura, Intendencia Municipal y la Asociación de Conjuntos del Folklore.
Pero a pesar de la Leyes que protegen al quirquincho es muy preocupante su situación, actualmente no existen medidas de conservación concretas, el Ministerio de Medio Ambiente y Agua a través de la Dirección General de Biodiversidad y Áreas Protegidas (DGBAP) y la Policía Forestal y Medio Ambiente POFOMA realizán campañas para evitar el uso de animales silvestres en festividades, sin mucho impacto ya que se realiza este trabajo previo a estas festividades como el Carnaval.
El Parque Nacional Sajama es la única Área Protegida que alberga esta especie, se han realizado investigaciones en la zona para fijar lineamientos para su conservación, a pesar de estos estudios existe un vacío de información que permita el conocimiento de aspectos como la biología, distribución, abundancia y población de la especie por su particular comportamiento, y si no se toma conciencia de la situación actual del quirquincho quiza en un futuro no muy lejano tengamos que lamentar la pérdida de esta especie y recién valoremos la importancia de este particular animal para mantener el equilibrio del ecosistema de la Puna.
Foto de portada: un quirquincho andino (Chaetophractus nationi). Créditos: Yamil Antonio Lino
Kantuta Wyñay Palenque Nieto es ingeniero agrónoma y educadora de profesión, nacida en el departamento de Oruro, razon por la cual tiene interes por la conservación del quirquincho ya que es símbolo de su ciudad de origen. Realizó investigaciones sobre la población de quirquincho gracias a una beca de la Fundación PUMA en el Parque Nacional Sajama, entre los años 2007-2010.